La ciudad de Alcudia, ubicada
entre las bahías de Alcudia y Pollensa, y a tan sólo 18 km de Sa Boleda, se halla en un enclave estratégico sobre el que han
florecido diversas culturas y civilizaciones. En la época romana, los restos de
la ciudad de Pollentia evocan un esplendoroso pasado en el que Alcudia, además
de ser la capital administrativa de la isla, también era el puerto desde el que
se comerciaba con vino y aceite de oliva hacia el resto del Imperio.
La importancia estratégica de
Alcudia perdurará durante buena parte de la Edad Media, y junto con Palma,
será, hasta bien entrado el siglo XIX, uno de los escasos núcleos de población
de la isla abiertos al Mediterráneo, fuente de riqueza y comercio,
pero también un medio hostil en el que abundan los ataques de corsarios y la
piratería, prueba de ello es el saqueo turco de Ciutadella (Menorca) en 1558.